Winter is Coming… 10 Consejos para cuidar tu cabello durante los meses de frío - Blog Olistic
9 nov 2022

Winter is Coming… 10 Consejos sobre cómo cuidar el pelo en invierno

De la misma manera que modificamos el cuidado de nuestra piel para que sea más eficaz frente a los meses más fríos, también debemos adaptar cómo cuidar el pelo en invierno.

Al llegar el invierno, existen ciertas condiciones que pueden hacer que nuestro cabello se dañe. El aire exterior es más frío, el aire del interior es más seco, encendemos distintos dispositivos como la calefacción o chimeneas y utilizamos más frecuentemente el secador de pelo. Esto puede provocar que el cabello se deshidrate y se vuelva más quebradizo, ocasionando un daño a nuestro pelo que queremos evitar para que, en la próxima temporada, en la que llevaremos el pelo siempre al descubierto, esté sano y fuerte.

A continuación, comentaremos 10 aspectos sobre cómo cuidar el pelo en invierno.

 

Tip 1: Evita las duchas con agua muy caliente ♨️

A pesar de que ducharnos con agua muy caliente cuando la temperatura exterior es fría es muy tentador, no es beneficioso ya que reseca tanto la piel como el cuero cabelludo. Esto puede traducirse en descamación y picor. Por lo que hay que intentar ducharnos con agua templada todo el año.

 

Mujer dándose una ducha

 

Tip 2: Reduce el uso de secadores y planchas 🌫️

El uso diario de planchas y secadores puede deshidratar nuestro pelo, empeorando progresivamente su calidad. Esto se debe a que son fuentes directas de aplicación de calor sobre nuestro pelo, lo que puede ocasionar que las fibras de queratina se vuelvan más frágiles y acaben rompiéndose.

Sería recomendable descansar algunos días o, si no fuera posible, disminuir la temperatura y la distancia a la que aplicamos el secador. Utiliza un secador que permita regular la temperatura, incluyendo distintas velocidades, un botón de aire frío y que cuente con un interruptor térmico de seguridad que proteja eficazmente ante las sobreexposiciones de calor intenso.

 

Tip 3: Deja de lado el champú seco 🧴

El champú seco es una alternativa útil en verano para eliminar la suciedad y la grasa del cabello sin necesidad de mojar el pelo. Sin embargo, debido a que está diseñado para absorber el aceite, particularmente de las raíces y del cuero cabelludo, puede provocar mayor deshidratación y rotura durante los meses más fríos. Si no puedes pasar el otoño y el invierno sin champú seco, intenta usarlo menos de lo habitual o aplicarlo con menos frecuencia.

 

Tip 4: No olvides hidratar el tallo piloso 🌱

El cuero cabelludo es una extensión de tu piel y, de la misma manera que hidratamos nuestra dermis, también debemos hidratar en invierno el cuero cabelludo. En esta época puede encontrarse más seco, por lo que este paso será especialmente importante. Existen diferentes productos con distintas propiedades que cumplen esta función, en mi artículo “Cómo recuperar tu pelo después del verano” puedes encontrar algunas recomendaciones.

 

Tip 5: Elige el tinte correcto 🎨

En invierno, nuestro pelo está más seco que en otras épocas del año, por lo que, dependiendo del estado en el que se encuentre, hay que valorar el tipo de tinte que queremos aplicar. La decoloración, por ejemplo, lo reseca mucho, por lo que quizás podemos optar por colores más oscuros y aplicar tintes temporales que no dañan la cutícula, ya que el pigmento se deposita en las capas más superficiales del pelo, siendo menos agresivos que los tintes permanentes.

 

Tip 6: Di sí a la protección solar también en invierno 🌞

En invierno también estamos expuestos a los rayos UVB y UVA del sol, sobre todo si realizamos actividades como el esquí o los deportes de montaña. Los rayos solares pueden degradar los aminoácidos que componen la fibra capilar, provocando una pérdida de brillo en el cabello. Además, si estas exposiciones son prolongadas, pueden producir daños más intensos en la cutícula y provocar un mayor desgaste, generando encrespamiento y puntas abiertas. Por eso, uno de los consejos sobre cómo cuidar el pelo en invierno es utilizar accesorios como sombreros, gorros, gorras o cascos (dependiendo de la actividad que realicemos) para proteger nuestro pelo de los rayos UV.

 

Tip 7: Ponle remedio a la electricidad estática en el pelo ⚡

La electricidad estática capilar se produce cuando la humedad no puede penetrar en el tallo del pelo. Esto se debe, en parte, a que el aire es mucho más seco en los meses fríos. Cuando nos quitamos un gorro en invierno, como el aire está seco, la electricidad estática permanece en el cabello y las cargas moleculares repelen las fibras capilares entre sí. Mantener el cabello hidratado es la mejor manera de lidiar con la electricidad estática. Incluso podrías considerar invertir en un humidificador para rehidratar el aire de tu hogar.

 

Tip 8: Mantén a raya tus niveles de estrés 🧘

Con la llegada del frío, también surgen distintos tipos de estrés relacionados con los días más cortos, el aumento de ciertas enfermedades respiratorias e, incluso, con las preparaciones para las actividades festivas.

El estrés eleva la actividad de la glándula suprarrenal produciendo mayor secreción de cortisol (hormona del estrés) y hay estudios que han sugerido que los niveles elevados de esta pueden inducir a la caída del cabello. Para intentar disminuir el estrés debemos cuidar nuestras horas y calidad de sueño, realizar actividades que nos desconecten de nuestra rutina diaria y mantener una dieta balanceada.

 

Tip 9: No descuides tu alimentación 🍎

Es importante no descuidar nuestra alimentación durante todo el año, pero en especial en estos meses con la llegada de las fiestas, ya que una dieta balanceada, que incluya los mejores alimentos para la caída del pelo, nos ayudará a mantener una adecuada salud capilar a largo plazo.

 

Proteínas y aminoácidos

Nuestro pelo y nuestras uñas están formados en su mayoría por una proteína llamada queratina. Existen alimentos, tanto de origen animal como vegetal, que son una fuente importante de proteínas:

🐟 Origen animal: carnes blancas, rojas, pescados, mariscos, huevos y lácteos.
🌾 Origen vegetal: legumbres (lentejas, judías, garbanzos, alubias, guisantes, soja y sus derivados como el tofu, tempeh, miso y heura), cereales (trigo, avena, quinoa, mijo y centeno) y frutos secos y semillas (almendras, avellanas, nueces, pistachos y semillas de chía, lino y sésamo).

 

Vitaminas

Tanto una deficiencia como un exceso de ellas puede alterar la calidad y el crecimiento de nuestro cabello. En mi artículo sobre nutrientes para proteger el cabello del frío te cuento cuáles son las mejores vitaminas para la caída del pelo en las fechas invernales y por qué.

 

Antioxidantes

Ayudan a proteger y mantener sano nuestro pelo al prevenir el daño oxidativo. Algunos ejemplos de alimentos ricos en antioxidantes son:

🍇 Uvas: poseen polifenoles como el resveratrol, además de vitamina E.
🍠 Cúrcuma: es un antioxidante que contrarresta la respuesta inflamatoria provocada por el envejecimiento, el estrés y el medio ambiente que puede dañar el cabello.
🐠 Salmón, trucha arcoíris, algas verdes, algunos hongos, camarones, langostas o cangrejos: son fuente de astaxantina, un antioxidante y antinflamatorio natural del grupo de los carotenoides.

Tip 10: Apóyate en nutricosméticos como Olistic para potenciar tu salud capilar 🌿

En la fórmula de Olistic podemos encontrar gran parte de los nutrientes mencionados anteriormente, siendo un complemento ideal de una dieta balanceada. Contribuye al cuidado de nuestro pelo durante todo el año y contiene ingredientes como la ashwagandha que ayuda a equilibrar los niveles de cortisol, mejorando así el ciclo de crecimiento del cabello.

El inicio del frío, los días con menor luz solar, los cambios de rutinas y de hábitos alimenticios repercuten en la calidad del cabello y del pelo en formación.

Para mantener la salud del cabello en invierno es importante cuidarlo tanto de forma interna como externa, combinando rutinas de cuidado capilar con hábitos de alimentación saludables. Los nutricosméticos como Olistic son una buena manera de prevenir o tratar alteraciones de nuestro pelo relacionados con los meses de frío.

 

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